Foto vía El Faro del Fin del Mundo.
En 1950 es que Ronald escribe por primera vez del asunto. Lo dice de esta manera:
Y la necesidad de placer es tal, que para obtenerlo puede soportarse una gran cantidad de dolor.
El placer es el patrimonio positivo. Es gozar del trabajo, es contemplar las obras bien hechas, es un buen libro o un buen amigo, es despellejarse las rodillas escalando el Matterhorn […] es aventura y esperanza y entusiasmo y «algún día aprenderé a pintar»; es comer una buena comida o besar una chica guapa o jugarse un buen farol en la bolsa de valores. Es lo que el Hombre hace que disfruta hacer; es lo que el Hombre hace que disfruta contemplar; es lo que el Hombre hace que disfruta recordar; y puede ser simplemente la conversación sobre cosas que sabe que no hará nunca.
L. Ronald Hubbard
Dianética, la Ciencia Moderna de la Salud Mental
Y la verdad es que ¿qué otra razón, cuál motivo diferente a estos podríamos tener para levantarnos de la cama cada día?
No soy amante de los deportes. Detesto los «juegos de mesa» y, como toda mamá que se respete, no quiero saber de los videojuegos… Sin embargo, sí soy amante de algunos juegos en particular, y mientras más difíciles, mejor.
La verdad es que cuando dejamos de lado otras cosas que para los demás constituyen parte importante de la vida, cuando sacrificamos la gloria personal para obtener la del equipo, cuando metemos la pata y hacemos el ridículo, o cuando llega el momento decisivo de dar hasta la última gota de nosotros y alcanzar ese trofeo… en esos momentos no hay gran diferencia entre estar en un campo de fútbol, en la presentación decisiva ante un cliente o en una jornada de entrenamiento a maestros en la Tecnología de Estudio, en lo más remoto de la frontera. En todos los casos, nos sentimos con energía y determinación de sobra para vencer cualquier obstáculo y llegar a nuestra meta. En todos los casos, estamos en el tono de «Juegos», en 22.0 en la escala tonal.
Hace una semana, el amigo Luis, del blog El Faro del Fin del Mundo, publicó la colección más impresionante de fotos sobre los Juegos Olímpicos y no pude resistir compartirlas contigo. Y cuando digo más impresionante, me quedo corta. ¿No me crees? ¡Compruébalo! Hazte de cuenta que es un video, abre este enlace, pon las fotos a cargar y bébete este gran vaso de Theta, bien frío (o calientito si vives en el Sur). Luego, nos cuentas qué te pareció. :D
Querida Milla: Al contemplar de nuevo el álbum fotográfico de los Juegos Olímpicos a través de tu interesantísimo blog, me ha parecido más impresionante si cabe. Seguramente, el filtro de la luz tropical que tú tan sabiamente le has aplicado ha producido ese hermoso efecto en mis ojos.
Muchas gracias. Recibe un fuerte abrazo.
Luis
Hola Milla! De verdad hacia dias que no visitaba tu Blog, gracias por recordarmelo.
Muy genial estas fotos. Que cosa que es el juego.A mi me dio deseos de jugar a lo que se: Scientology con mas ainco y de verdad viendolo como un juego y con el proposito de ganar. Con mucho A.R.C. Galo
Querido Luis, los filtros son juguetes apasionantes. Son para los fotógrafos como los «plugins» para las «ciberpersonas». Gracias a ti por tu amable comentario. Es un honor tenerte por acá.
Hola Galito! Pues muy mal hecho por no venir por acá y muy bien hecho por regresar! Tus visitas y comentarios siempre son apreciados. De verdad.
Es un placer haber leído otra vez esta cita.
Atte.
Efra
Para nosotros también. :)